Aunque el edificio haya sufrido importantes reformas para convertirse en un museo, cada estancia de la antigua fábrica de cerveza mantiene su carácter original, conservando incluso las enormes y antiguas calderas que formaban parte del proceso de elaboración de la cerveza. Mientras se avanza a través de las instalaciones es posible hacer un sin fin de actividades. Después de conocer todos los secretos sobre la fabricación de una de las principales marcas a nivel mundial, el tour termina con una degustación de cerveza.